La mayor parte de nuestra vida está formada por una serie de imágenes, imágenes que pasan por delante de nosotros como pueblos en una autopista. Pero a veces, hay momentos que nos atrapan cuando suceden, y sabemos que esos instantes son algo más que imágenes pasajeras. Sabemos que esos momentos, en su totalidad, siempre permanecerán.
En este momento hay más de seis mil millones de habitantes en el mundo. Algunos huyen asustados, otros vuelven a casa, algunos cuentan mentiras para poder sobrevivir, otros se enfrentan a la verdad, algunos son hombres malos en guerra contra el bien, y algunos son buenos y luchan contra el mal. Seir mil millones de personas en el mundo, seis mil millones de almas, y a veces... solo necesitas a una.
¿Alguna vez te has preguntado si creamos los momentos de nuestras vidas o si son esos momentos los que nos crean a nosotros?. Si pudieras volver a atrás y cambiar solo una cosa de tu vida , ¿lo harías?. Y si fuera así, ¿ese cambio haría que tu vida fuera mejor, o ese cambio terminaría partiendote el corazón, o rompiendole el corazón a otro? ¿Elegirías un camino completamente diferente o solo cambiarías una cosa, un solo momento, un momento que siempre quisiste recuperar?.
A veces el dolor es una parte tan enorme de tu vida, que piensas que siempre va a estar ahí , porque no recuerdas ni un momento en que no estuviera presente. Hasta que un día sientes algo diferente, algo que te perturba porque no estas acostumbrado a ello, y en ese momento, comprendes que eres feliz. La felicidad se presenta de muchas formas... en compañía de tus amigos, en la sensación que tienes cuando haces realidad el sueño de otra persona, o en la promesa de una esperanza renovada. Es bueno permitirse ser feliz , porque nunca sabes lo fugaz que puede ser esa felicidad.
Lo más importante es no sentir amargura por las decepciones de la vida, aprender a dejar atrás el pasado y reconocer que todos los días no puede brillar el sol. Y cuando te encuentres perdido en las tinieblas de la desesperación, recuerda que solo en la oscuridad de la noche podrás ver las estrellas, y que esas estrellas, te guiarán a casa. Así que no tengas miedo de cometer equivocaciones, de tropezar y de caer, la mayoría de las veces las grandes recompensas se obtienen cuando haces las cosas que más te asustan. Tal vez logres cumplir todos tus deseos, tal vez consigas más de lo que puedas imaginar. Quien sabe a donde te llevará la vida, el camino es largo y en el fondo, el viaje es el destino.´